Siglo XX y XXI
A principios de siglo se instalan en el municipio dos nuevas industrias: una fábrica de mosaicos creada en los años 20 por los hermanos Infante y ADASA una fábrica de armamento de aviación fundada en los años 30 y que centrará la actividad económica del municipio hasta su desaparición en 1963.
La Guerra Civil fue nefasta para Pinto, las tropas nacionales toman el pueblo el 2 de noviembre de 1936, utilizándole de base de operaciones para lanzar una ofensiva que dio lugar a la Batalla del Jarama. De aquel momento se conserva el yacimiento de Los Yesares, situado en la Cañada Real Galiana al N.E. del municipio.
En cuanto al crecimiento urbanístico hay que destacar:
- A principios de siglo se produce la extensión del casco urbano por su zona más occidental, al otro lado del ferrocarril. En torno a la Ermita del Cristo surgen diferentes villas veraniegas. En 1925 se instaura la doble vía de ferrocarril y se construye el conjunto de edificios de la Estación.
- No existen transformaciones fundamentales en el casco urbano hasta los años 60. Hasta esa fecha Pinto tiene un ritmo de crecimiento muy bajo: en 1900 2700 hab. y en 1960 3.500 hab.; antes de la guerra civil 500 casas y en 1950 650 casas. Se mantuvo pues como un pequeño municipio rural hasta finales de los 60.
- En 1967 se redacta el primer PGOU que potencia el crecimiento urbanístico de forma desmesurada: entre 196770 se duplica el parque inmobiliario residencial, pasando de 1300 a 2511 viviendas. Es la época en que surgen los conocidos barrios Parque Éboli, La Indiana o Buenos Aires.
- La evolución del municipio a partir de los años 80 se verá mediatizada por un nuevo PGOU, aprobado en 1984 que presenta un planeamiento más riguroso y que se plasmará fundamentalmente en sectores amplios: Parque Pinto, Puerta de Pinto y en los últimos años Parque Europa.
Ya en el siglo XXI el municipio continúa su crecimiento y desarrollo con nuevos barrios como La Tenería I y II, y con la llegada de nuevas industrias y comercios.
A nivel patrimonial se realiza una restauración completa de algunos edificios históricos como la iglesia parroquial de San José, la iglesia parroquial de Santo Domingo de Silos, el Centro Municipal de Cultura (antiguo convento de San José). Y la torre de Pinto, que había sido restaurada en el siglo XX, abre sus puertas al público.